Se podría decir que a Sergio Pérez le robaron podios consecutivos por primera vez en su carrera en la Fórmula 1 cuando enormes columnas de humo y luego llamas emergieron de la parte trasera de su Racing Point al final del Gran Premio de Bahrein, Pérez dijo que era un MGU. K problema eléctrico que obligó a su abandono.
El mexicano estaba listo para consolidar su posición de cuarto en la clasificación de pilotos, después de haber pasado la mayor parte de la carrera en el podio con un manejo supremo de los neumáticos y estaba en camino de terminar tercero, detrás del ganador de la carrera Lewis Hamilton y Max Verstappen de Red Bull.
Pero con tres vueltas para el final, Pérez tenía una cómoda brecha con Alex Albon de Red Bull en cuarto lugar, el mexicano comenzó a reducir la velocidad antes de salirse de la pista y estacionar el auto. Tras el análisis, el problema mecánico se diagnosticó cómo un problema MGU-K.
"Creo que hicimos una carrera perfecta y el podio fue definitivamente nuestro - iba a ser uno de mis mejores en la Fórmula 1", dijo Pérez. “Fue desgarrador retirarse con tres vueltas restantes debido a un problema eléctrico de MGU-K.
“Íbamos a terminar por delante de un Red Bull y un Mercedes, lo cual es un gran mérito para todos nosotros en el equipo, y también hicimos un buen trabajo durante todo el fin de semana.
"Hemos perdido algunos puntos realmente importantes hoy, lo que hace que sea un poco más difícil en las batallas por el campeonato de pilotos y constructores, pero lo positivo es que todavía quedan dos carreras más para compensarlo".
El retiro puso fin a la racha de 18 carreras consecutivas de Pérez en los puntos y lo dejó quinto en la clasificación de pilotos, a dos puntos de Daniel Ricciardo con dos carreras por disputar.
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